Bipartidismo: el ingrediente principal de una bomba llamada ‘Guerra de los 1000 días’
Al hablar de política en Colombia, la conversación necesariamente pasa por los caminos de los dos partidos tradicionales en el país: el Liberal y el Conservador.
El nacimiento de ambos y su historia, que se mancha de sangre con la Guerra de los 1000 días y otros escenarios de nuestra memoria, son fundamentales para entender cómo funcionó el bipartidismo en el país, figura predominante desde la Independencia, pasando por el conflicto de finales del Siglo XIX, hasta mediados del siglo XX.
¿Qué es y cómo funcionó el bipartidismo en Colombia?
Es una estructura política en la que dos partidos políticos se disputan mayoritariamente el poder, de acuerdo a la definición general del concepto.
Un ejemplo clave y significativo es el sistema de los Estados Unidos, en donde hay un par de grupos predominantes: el Partido Republicano y el Partido Demócrata. Estos movimientos se han dividido históricamente presidentes en aquella nación.
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En Colombia funcionó así, pero con los famosos liberales (rojos) y conservadores (azules).
Este sistema predominó en los años posteriores a la victoria de Independencia lograda por el Ejército de Simón Bolívar, cuando los españoles se fueron de la tierra de la Nueva Granada.
Tras el fin de este ciclo, surgieron dos fuerzas políticas: Centralistas, afines a los principios del conservatismo inglés y cercanos a la Iglesia Católica y los Federalistas, con influencia marcada de la Revolución Francesa.
Desde 1848 y 1849, estas fuerzas se convirtieron en los liberales y los conservadores. Un par de años atrás, figuras representativas de ambas coaliciones redactaron los fundamentos de cada partido.
Por el lado de los Conservadores fueron José Eusebio Caro y Mariano Ospina Rodríguez, mientras que la representación de los liberales la lideró el señor Ezequiel Rojas.
Caro y Ospina Rodríguez pusieron la primera piedra de un movimiento que, desde sus inicios, intentó defender los valores de la religión y una sociedad regida por los principios coloniales.
En tanto, los liberales se movían entre ideas más progresistas y totalmente opuestas a lo que querían defender los conservadores y abogaban por la defensa de los derechos de los trabajadores, todo con un enfoque social.
¿Qué papel jugó el bipartidismo en la Guerra de los 1000 días?
El conflicto estalla por una razón principal: la rivalidad entre ambos partidos políticos tradicionales a finales del siglo XIX. Fueron los desacuerdos, las diferencias y los conflictos entre ambos, el detonante final para la confrontación bélica más sangrienta y recordada de nuestra historia.
Las inconformidades generadas por la política de Regeneración permitieron un ambiente de hostilidad, instigado por liberales, quienes querían aprovechar para llegar al poder y acabar con la hegemonía conservadora.
Los vientos de guerra soplaron más fuerte con este entorno de discrepancias y con otras crisis, como el aumento de los precios del café y la crisis económica por la que pasaba el país.
Con la guerra se demostraron las devastadoras consecuencias de la división política de un país entre dos bandos que, hasta finales del siglo XX se dividieron el poder, sin un beneficio claro para Colombia.
REDACCIÓN CANAL INSTITUCIONAL
