Día 6 novena de navidad: oraciones y gozos

Novena de Navidad: día 6 oraciones y gozos


Foto Pixabay

Sexto día de la novena de navidad. Sábado 21 de diciembre de 2024. Oraciones y gozos.  Los fieles suelen rezar la novena con el fin de fortalecer su fe, pedir bendiciones para sus seres queridos, y meditar sobre el misterio de la Navidad y la encarnación de Dios en Jesús. 

Contenido

Se inicia con la señal de la cruz: en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Novena de Navidad: consideración día 6

Jesús había sido concebido en Nazaret, domicilio de José y María, y allí era de creerse que había de nacer, según todas las probabilidades. Mas Dios lo tenía dispuesto de otra manera y los profetas habían anunciado que el mesías nacería en Belén de Judá, ciudad de David.

Para que se cumpliese esa predicción, Dios se sirvió de un medio que no parecía tener ninguna relación con este objeto, a saber, la orden dada por el emperador Augusto, que todos los súbditos del imperio romano se empadronasen en el lugar de donde eran originarios.

María y José, como descendientes que eran de David, no estaban dispensados de ir a Belén. Ni la situación de la Virgen Santísima ni la necesidad en que estaba José del trabajo diario que les aseguraba la subsistencia, pudo eximirles de este largo y penoso viaje, en la estación más rigurosa e incómoda del año.

No ignora Jesús en qué lugar debe nacer e inspira a sus padres que se entreguen a la Providencia, y que de esta manera concurran inconscientemente a la ejecución de los designios.

Almas interiores, observad este manejo del Divino Niño, porque es el más importante de la vida espiritual; aprended que quien se haya entregado a Dios ya no ha de pertenecerse a sí mismo, ni ha de querer a cada instante sino lo que Dios quiera para él; siguiéndole ciegamente aun en las cosas exteriores, tales como el cambio de lugar donde quiera que le plazca conducirle.

Ocasión tendréis de observar esta dependencia y fidelidad inviolable en toda la vida de Jesucristo, y este es el punto sobre el cual se han esmerado en imitarle los santos y las almas verdaderamente interiores, renunciando absolutamente a su propia voluntad.

Oración para todos los días

Benignísimo Dios de infinita caridad, que tanto amasteis a los hombres, que les disteis en vuestro hijo la prenda de vuestro amor, para que hecho hombre en las entrañas de una Virgen naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio; yo, en nombre de todos los mortales, os doy infinitas gracias por tan soberano beneficio.

En retorno de él os ofrezco la pobreza, humildad y demás virtudes de vuestro hijo humanado, suplicándoos por sus divinos méritos, por las incomodidades en que nació y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre, que dispongáis nuestros corazones con humildad profunda, con amor encendido, con tal desprecio de todo lo terreno, para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente.

Amén

Gloria al Padre
y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio,
ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén (tres veces).

Foto Pixabay

 

Oración a la Santísima Virgen

Soberana María que por vuestras grandes virtudes y especialmente por vuestra humildad, merecisteis que todo un Dios os escogiese por madre suya, os suplico que vos misma preparéis y dispongais mi alma y la de todos los que en este tiempo hiciesen esta novena, para el nacimiento espiritual de vuestro adorado hijo.

¡Oh dulcísima madre!, comunicadme algo del profundo recogimiento y divina ternura con que lo aguardasteis vos, para que nos hagáis menos indignos de verle, amarle y adorarle por toda la eternidad.

Amén.

Ave María (tres veces). 

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Oración a San José

¡Oh santísimo José, esposo de María y padre adoptivo de Jesús! Infinitas gracias doy a Dios porque os escogió para tan soberanos misterios y os adornó con todos los dones proporcionados a tan excelente grandeza.

Os ruego, por el amor que tuvisteis al Divino Niño, me abracéis en fervoroso deseo de verle y recibirle sacramentalmente, mientras en su divina esencia le veo y le gozo en el cielo. Amén.

Un Padre Nuestro y Ave María.    

Gloria al Padre

y al Hijo

y al Espíritu Santo.

Como era en el principio,

ahora y siempre,

por los siglos de los siglos.

Amén.

Foto Marianos de la Inmaculada Concepción

 

Oración al Niño Jesús

Acordaos, ¡oh dulcísimo Niño Jesús!, que dijisteis a la venerable Margarita del santísimo Sacramento, y en persona suya a todos vuestros devotos, estas palabras tan consoladoras para nuestra pobre humanidad agobiada y doliente: "Todo lo que quieras pedir, pídelo por los méritos de mi infancia y nada te será negado".

Llenos de confianza en vos, ¡oh Jesús!, que sois la misma verdad, venimos a exponeros toda nuestra miseria. Ayúdanos a llevar una vida santa, para conseguir una eternidad bienaventurada.

Concédenos por los méritos infinitos de vuestra infancia, la gracia de la cual necesitamos tanto. Nos entregamos a vos, ¡oh Niño omnipotente!, seguros de que no quedará frustrada nuestra esperanza, y de que, en virtud de vuestra divina promesa, acogeréis y despacharéis favorablemente nuestra súplica. Amén.

Foto Familia Franciscana

 

Oración para la familia

Señor, haz de nuestro hogar un sitio de tu amor. Que no haya injuria porque Tú nos das comprensión. Que no haya amargura porque Tú nos bendices. Que no haya egoísmo porque Tú nos alientas. Que no haya rencor porque Tú nos das el perdón. Que no haya abandono porque Tú estás con nosotros.

Que sepamos marchar hacia ti en tu diario vivir. Que cada mañana amanezca un día más de entrega y sacrificio. Que cada noche nos encuentre con más amor. Haz Señor con nuestras vidas, que quisiste unir, una página llena de ti.

Haz Señor de nuestros hijos lo que anhelas, ayúdanos a educarlos, orientarlos por tu camino. Que nos esforcemos en el apoyo mutuo. Que hagamos del amor un motivo para amarte más. Que cuando amanezca el gran día de ir a tu encuentro nos conceda el hallarnos unidos para siempre en ti.

Foto Pixabay

 

Novena de Navidad: Gozos  

Dulce Jesús mío, mi niño adorado ¡Ven a nuestras almas! ¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Oh, Sapiencia suma del Dios soberano, que a infantil alcance te rebajas sacro! ¡Oh, Divino Niño, ven para enseñarnos la prudencia que hace verdaderos sabios! 

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Oh, Adonai potente que Moisés hablando, de Israel al pueblo diste los mandatos! ¡Ah, ven prontamente para rescatarnos, y que un niño débil muestre fuerte el brazo! 

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Oh, raíz sagrada de José que en lo alto presenta al orbe tu fragante nardo! Dulcísimo Niño que has sido llamado Lirio de los valles, Bella flor del campo. 

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Llave de David que abre al desterrado las cerradas puertas de regio palacio! ¡Sácanos! Oh Niño con tu blanca mano, de la cárcel triste que labró el pecado! 

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Oh, lumbre de Oriente, sol de eternos rayos, que entre las tinieblas tú esplendor veamos! Niño tan precioso, dicha del cristiano, luzca la sonrisa de tus dulces labios.

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Espejo sin mancha, santo de los santos, sin igual imagen del Dios soberano! ¡Borra nuestras culpas, salva al desterrado y en forma de niño, da al mísero amparo! 

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Rey de las naciones, Emmanuel preclaro, De Israel anhelo Pastor del rebaño! ¡Niño que apacientas con suave cayado ya la oveja arisca, ya el cordero manso! 

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Ábranse los cielos y llueva de lo alto bienhechor rocío como riego santo! ¡Ven hermoso Niño, ven Dios humanado! ¡Luce, Dios estrella! ¡Brota, flor del campo!

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Ven, que ya María previene sus brazos, do su niño vean, en tiempos cercanos! ¡Ven, que ya José, con anhelo sacro, se dispone a hacerse de tu amor sagrario! 

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Del débil auxilio, del doliente amparo, consuelo del triste, luz del desterrado! ¡Vida de mi vida, mi dueño adorado, mi constante amigo, mi divino hermano! 

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

  1. ¡Ven ante mis ojos, de ti enamorados! ¡Bese ya tus plantas! ¡Bese ya tus manos! ¡Prosternado en tierra, te tiendo los brazos, y aún más que mis frases, te dice mi llanto! 

¡Ven, ven, ven... ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven... ven, ven...

Ven a nuestras almas,

Jesús ven, ven a nuestras almas,

No tardes tanto, no tardes tanto,

Jesús ven, ven!

  1. ¡Ven Salvador nuestro por quien suspiramos Ven a nuestras almas, Ven, no tardes tanto!

Dulce Jesús mío

mi niño adorado

¡Ven a nuestras almas! 

¡Ven no tardes tanto!

Se cierra con: en el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo, Amén.

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REDACCIÓN CANAL INSTITUCIONAL