"Colombianos, cesó la horrible noche": Juan Manuel Santos


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Tras 52 años de conflicto armado interno en Colombia con las Farc, la llave de la paz abrió un nuevo capítulo en la historia del país. Crónica del 26 de septiembre de 2016.
Las víctimas fueron los protagonistas de un acto ceremonial, en el que una bala, fabricada originalmente para matar,  se convirtió en un 'balígrafo' que firmaría la paz definitiva en Colombia.
Un minuto de silencio, tal vez, no bastó para conmemorar a los 267.162 colombianos que perdieron la vida en medio de la guerra, desde sus orígenes, en 1964.
Sin embargo, con el 'balígrafo' se trazó una nueva historia que, tras una búsqueda incesante durante cuatro años, devolvió la esperanza a quienes, a la fuerza, tuvieron que enfrentarse cara a cara con la crudeza conflicto.
Y fueron las ‘alabadoras de Bojayá’, un grupo de 10 mujeres víctimas de la masacre ocurrida en este municipio del Chocó (2002), quienes entonaron un cántico de victoria, de una paz que algún día vieron tan lejana.
“Pedimos a los violentos no más repetición”, cantaban, mientras unas túnicas blancas adornaban sus cuerpos, tan fuertes como las secuelas que dejó el conflicto en Bojayá.
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“Ofrezco, sinceramente, perdón a todas las víctimas del conflicto”: Rodrigo Londoño
Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia fue cuando, tras más de cinco décadas de conflicto, el comandante Rodrigo Londoño pidió perdón a las víctimas.
Y aseguró que van “hacia a una política sin armas” y que la paz es de toda Colombia; por lo que es necesaria una transformación social.
Para el secretario general de la ONU, Ban-Ki-Moon, es la oportunidad para que  “los colombianos puedan unirse y hacer de este un proyecto nacional” y abrir “un espacio para una política que no esté basada en violencia”.
 
¡No más guerra!
Los miles de asistentes a la ceremonia se unieron al unísono en un clamor generalizado. “¡No más guerra!”, gritaban; mientras el Presidente, Juan Manuel Santos, en un emotivo discurso, pronunciaba uno de los versos del himno nacional “¡En surcos de dolores el bien germina ya!.
El primer mandatario, además de hacer un sentido homenaje a las comunidades víctimas de la guerra, felicitó a los integrantes de las  Fuerzas Armadas y de Policía. “Gracias a su sacrificio y valor, nos condujeron a este día”, dijo.
Y aseguró que lo mejor que pudo  hacer la guerrilla de las Farc fue “cambiar las balas por los votos y las armas por la ideas”. "Lo que firmamos hoy, es una declaración del pueblo colombiano ante el mundo", puntualizó.
“Todo pacto de paz es imperfecto, pero sabemos que este que hemos logrado es el mejor posible”, afirmó.
“Yo prefiero un acuerdo imperfecto que salve vidas, a una guerra perfecta que siga sembrando muerte”, concluyó.
El himno de la alegría selló un día que, quizás no borra el pasado de Colombia, pero sí reescribe el futuro de un país que, por la vía del diálogo, logró dar fin a uno de los conflictos más largos en Latinoamérica.
 
Por: Ana Lucía Rey González- Equipo Digital Canal Institucional