5 acciones con las que puedes ayudar a tu comunidad

En el Día internacional de la solidaridad humana reunimos algunas de las búsquedas más comunes de los usuarios, relacionadas con la colaboración en comunidad, ya que se ha ido convirtiendo en un área de gran interés para las familias colombianas.

Existen cientos de alternativas para poner tus capacidades al servicio de tu entorno, muchas de ellas dependerán de tu círculo social particular, pero también existen muchas más que funcionan en general para cada comunidad.

En primer lugar, puedes pensar en áreas de tu interés (medio ambiente, ayuda a personas con necesidades, integración, entre otras) y la manera en que tú puedes ayudar a hacer un cambio o apoyar a los que tienen iniciativas para hacerlo.

1. Ayuda a tener un entorno más limpio

Puedes aportar a tener un vecindario o comunidad más limpia, desde pequeñas acciones que inicien desde tu entorno familiar. No botes basura en el suelo y si paseas a tu mascota recoge sus desechos. Entre más personas tomen conciencia de esto, se creará un ambiente más agradable.

También, si lo deseas, puedes llevar esta idea a otro nivel, ubicando “dispensadores de bolsas” en diferentes puntos del barrio, ya que en ocasiones no se recogen los desechos por no tener con qué hacerlo.

Reúne bolsas plásticas medianas o pequeñas y amarra una con otra para ir creando una cadena. Ponlas en el interior de una botella grande y asegúrala, sin tapa y con la boca hacia abajo, a un poste o algún punto de alta visibilidad. De esta manera, quien lo necesite, podrá tomar una cuando lo necesite.

2. Fomenta el diálogo

En cualquier comunidad es normal que haya momentos de diferencias y enfrentamientos por diferentes motivos. Ayuda a crear espacios de diálogo en los que se resuelvan estas situaciones, sin que pasen a actos violentos.

Puedes ofrecerte a servir de mediador cuando se requiera este tipo de reuniones o plantear encuentros periódicos en los que se expongan inconformidades para que se resuelvan a tiempo, para que no se vayan acumulando roces entre los miembros de la comunidad.

3. Propón iniciativas de voluntariado

Identifica alguna necesidad que pueda estar pasando tu comunidad o sector cercano y crea estrategias para solucionarlo.

Las alternativas son muchas: puedes crear una “canasta voluntaria” en la que cada miembro aporta algún alimento no perecedero para armar mercados para comunidades en pobreza; puedes crear bazares o actividades para reunir fondos para causas benéficas; hacer “donatones” de juguetes o ropa para fechas especiales como navidad.

4. Da ejemplo de compañerismo

De manera desinteresada ofrece alguna invitación a comer a un vecino o lleva comida a alguien que pueda estar pasando por algún momento difícil. En la actualidad, estamos acostumbrados a la lejanía, a pensar solo en nuestro círculo cercano, por lo que estos pequeños actos pueden desencadenar una actitud de relaciones fuertes fuera de nuestra familia.

Incentiva a esa persona a hacer lo mismo con alguien más, y de esta manera se creará una cadena de invitaciones y recargas de compañerismo.

5. Impacta con una actitud serena

Cuando optas por tener una actitud calmada ayudas a frenar el caos en situaciones de estrés. Un ejemplo de esto es la manera en que te enfrentas al tráfico en la ciudad. Si tomas una actitud calmada, dejas pasar a alguien y evitas usar frenéticamente el pito del carro, pones tu granito de arena para llevar este tiempo de estrés.

Lleva este consejo a tu hogar, trabajo o entorno y empezarás a notar que esto puede impactar a otros que a su vez lo replicarán.

Bonus: Sé creativo

Crea tus propias maneras de ayudar a tu comunidad: observa qué puede estar necesitando tu entorno o qué áreas aun pueden mejorar y crea las soluciones. Comparte tus ideas con más personas y actúa, no dejes que tus propuestas se queden solo en el pensamiento sino ejecútalas.

REDACCIÓN CANAL INSTITUCIONAL